Perséfone
En la
mitología griega Perséfone significa “la que lleva la muerte”.
Es hija de Zeus y de Deméter (ἡ Μητὴρ hê Mêtềr: ‘la madre’),
hermana mayor de Zeus, es la diosa
de la agricultura, nutricia pura de la tierra verde y joven, ciclo vivificador
de la vida y la muerte, y protectora del matrimonio y la ley sagrada.
La joven doncella, llamada
hasta entonces Kore (Κόρη: ‘hija’), es raptada por Hades y se convierte
en la reina del Inframundo.
Su historia tiene un gran
poder emocional: una doncella inocente, el dolor de una madre por el rapto y el
regreso de su hija. También es citada con frecuencia como un paradigma de los
mitos que explican procesos naturales, con el descenso y el regreso de la diosa
provocando el cambio de estación.
Perséfone estaba cogiendo
flores inocentemente con algunas ninfas cuando Hades apareció, emergiendo de una
grieta del suelo. Las ninfas fueron transformadas en las Sirenas por no haber
intervenido. La vida quedó paralizada mientras la desolada Deméter buscaba por
todas partes a su hija perdida. Hécate había oído sus gritos y sugirió a Demeter
hablar con Helios, el sol, que todo lo ve, para que le contase lo que había
pasado.
Finalmente, Zeus no pudo
aguantar más la agonía de la tierra y obligó a Hades a devolver a Perséfone,
enviando a Hermes para rescatarla. La única condición que se puso para liberar a
Perséfone fue que no probase bocado en todo el trayecto, pero Hades la engañó
para que comiese seis ,o cuatro según las fuentes, semillas de granada, que la
obligaban a volver cada año un mes por cada semilla.