DENOTACIÓN Y CONNOTACIÓN DEL LENGUAJE

          

Lenguaje denotativo

El lenguaje denotativo es el lenguaje objetivo, acorde con la realidad; aquel que se emplea para decir las cosas tal como son o se presentan, con toda claridad, con el ánimo de ser entendido por sus oyentes; sin utilizar ningún tipo de simbología.

El lenguaje denotativo se refiere de modo directo a un hecho o a un dato. Lo denota, lo nombra. Se encuentra en textos no-literarios. Éstas son algunas de sus características: Es más importante el significado que el significante. Su intención es transmitir información. Su lectura no puede cambiarse.

Ejemplo: Hoy asistimos al colegio y la primera, es la clase de matemáticas.

Es el uso común y práctico que hacemos del lenguaje. En otras palabras, es el lenguaje base que nos brinda referencias y datos directos, de hechos cotidianos, científicos, culturales, etc. Un teorema matemático o una noticia periodística son ejemplos claros del lenguaje denotativo.

Lenguaje connotativo

 

El lenguaje es uno solo, pero se habla de dos órdenes de significación, el primero es la denotación, una palabra quiere decir exactamente lo que es. Pero la CONNOTACIÓN, o el lenguaje connotativo (segundo orden de significación) se refiere particularmente a las diferentes acepciones que les damos a las palabras. Por ejemplo: la palabra CABEZA, es una parte del cuerpo humana, pero también es utilizada para decir: la cabeza de familia, la cabeza de la empresa.

 

Es el lenguaje que va más allá de lo meramente referencial y práctico. Lo connotativo es el lenguaje segundo, o expresivo, porque refleja el mundo interior del hablante. No sólo dice lo que dice, sino algo más. La literatura, la publicidad y las artes en general, utilizan fundamentalmente el lenguaje connotativo.